Las operaciones fraccionadas, también conocidas como "pitufeo" o "smurfing", son una técnica utilizada para evadir los umbrales de reporte establecidos en la LFPIORPI. Consiste en dividir una operación grande en múltiples transacciones más pequeñas para evitar la detección. La LFPIORPI requiere que las entidades obligadas tengan sistemas para identificar y reportar estas operaciones fraccionadas, considerándolas como una sola operación cuando se realizan por o en beneficio de una misma persona en un periodo determinado y que en su conjunto superen los umbrales de aviso.