La identificación no presencial en la LFPIORPI se refiere a los métodos utilizados para verificar la identidad de los clientes cuando no es posible hacerlo cara a cara. Esto ha ganado relevancia con el aumento de servicios financieros digitales. La ley permite el uso de tecnologías como videoconferencias, biometría, o validación de documentos digitales para la identificación remota. Sin embargo, las entidades deben implementar medidas adicionales de seguridad para mitigar los riesgos asociados, como la verificación cruzada con bases de datos oficiales, el uso de preguntas de seguridad, o la implementación de tecnologías anti-fraude. La identificación no presencial debe ser tan robusta como la presencial para cumplir con los estándares de la LFPIORPI.